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    Ya con este suman tres años de grandes triunfos para el atletismo cubano, 2005, 2006 y 2007; lo que puede traducirse en un excelente ciclo Olímpico 2005-2008.

    La triunfal faena se inició en tierras venezolanas, donde se celebró la segunda edición de los Juegos de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) y los representantes de la mayor isla de las Antillas, dominaron a sus anchas con un total de 64 preseas, de ellas 37 de oro, 22 de plata y 5 de bronce. En el plano individual destacan los triunfos de Yargelis Savigne en triple salto con nuevo récord nacional de 14.99 metros y en salto de longitud con 6.60; del también triplista Osniel Tosca con registro de 17.52 metros; de Michael Herrera en los 200 metros, con tiempo de 20.31 segundos; el nuevo récord nacional juvenil del vallista largo Omar Cisneros, con tiempo de 49.57 segundos; el saltador de altura Víctor Moya, con 2.31; así como los 6.076 puntos de Grechim Quintana en el heptathlon.

    Estos segundos Juegos del ALBA, sirvieron de preparación a los atletas cubanos para la cita principal de la temporada, los XV Juegos Panamericanos, que tuvieron como escenario la ciudad brasileña de Río de Janeiro. Allí en la urbe carioca, el atletismo cubano conquistó por tercera ocasión el título por países -antes lo había logrado en La Habana, 1991 y en Mar del Plata, 1995- ahora con 12 medallas de oro, ocho de plata y nueve de bronce para un total de 29 preseas. Nuevamente destaca en lo individual la saltadora Yargelis Savigne, ganadora del oro en el triple con salto de 14.80 y del bronce en el salto de longitud con 6.66 metros. Otros con gran brillo fueron el corredor de 800 metros Yeimer López, ganador con marca personal de 1:44.58 minutos; la corredora de maratón Mariela González, quien inició la cosecha cubana con su triunfo en esa agotadora prueba; la fenomenal Yipsi Moreno con sus 75.20 en el martillo, nuevo tope para la competencia; el saltador de altura Víctor Moya, triunfador con 2.32, en gran duelo con el bahamés Donald Thomas; también hay que resaltar a la velocista Roxana Díaz, quien repitió su título de Santo Domingo en los 200 metros, ahora con tiempo de 22.90 segundos.

    A la cita Panamericana le siguió en orden el XI Campeonato Mundial, celebrado en la ciudad japonesa de Osaka a finales de agosto, evento en el que nuestros representantes conquistaron tres preseas, una de cada color, logrando además diez finalistas. En lo individual ya es costumbre hablar del desempeño de la guantanamera Yargelis Savigne, una atleta que desde su incursión en el triple en la temporada de 2005, ha ofrecido grandes alegrías con sus saltos. Ahora en Osaka nos regaló un señor triple brinco de 15.28, válido para la medalla de oro y nueva cuota nacional; la medalla de plata correspondió a la camagüeyana Yipsi Moreno -titular en Edmonton 2001, Paris 2003 y plata en Helsinki 2005- quien nos tiene acostumbrados a dar siempre lo mejor de sí en pos de las medallas y en esta oportunidad, quedó a solo dos centímetros de lo más alto del podio, con 74.74 contra 74.76 de la ganadora, la alemana Betty Heidler; mientras que la medalla de bronce fue para la pinareña Yarelis Barrios, de grandes progresos este año y que en Osaka, se comportó como todo una consagrada ante su más exigentes rivales. Otros de aceptables resultados fueron Osniel Tosca, con su cuarto lugar en el triple salto, a solo un centímetro de la medalla de bronce; el vallista Dayron Robles, cuarto en una final ganada por el chino Xiang Liu; el decatlonista Yordanis García, con su récord nacional de 8.257 puntos, válidos para el octavo lugar, un atleta de apenas 18 años, que es uno de los grandes prospectos del campo y pista cubano actual.

    El otro gran evento de la temporada fue la Final Mundial de Atletismo, celebrada en la ciudad alemana de Stuttgart y que tuvo como excepcional protagonista al guantanamero Dayron Robles, quien con sus 12.92, no solo dominó la especialidad, sino que se convirtió en el primer vallista cubano en descender de los 13 segundos. Otra destacada actuación estuvo a cargo de Yipsi Moreno en el lanzamiento del martillo, ganadora por tercera ocasión de este evento, ahora lo logró con 73.76 metros. Cerrando las medallas cubanas, la saltadora de triple Yargelis Savigne, quien se impuso con 14.78, quintas fueron Arasay Thondike en el lanzamiento del martillo y Sonia Bisset en el lanzamiento de la jabalina.

    Los atletas juveniles también tuvieron su ajetreo competitivo. Primero fue el Panamericano en la ciudad brasileña de Fortaleza y después el Mundial de Cadetes en Ostrava, República Checa. En la cita continental los nuestros lograron un total de ocho preseas, con dos títulos, tres de plata y tres de bronce, los oro para la saltadora de altura Lesyanis Mayor y para el triplista Héctor Fuentes. Los más bisoños conquistaron en la urbe checa cuatro medallas, una de oro, una de plata y dos de bronce; aquí el protagonismo para las triplistas Dianelis Alcántara y Yusleidys Rivalta, con el uno-dos, que lograron, demostrando que cuando se hable de resultados en triple, hay que mencionar al triple cubano en cualquier categoría.

    Otro capítulo importante en el desempeño del campo y pista cubano en el año, fueron los ocho récords nacionales absolutos implantados, apartado donde la voz cantante la llevó Yargelis Savigne, con sus tres cuotas en el salto triple, 14.99, 15.09 y 15.28; también fueron protagonistas de nuevos primados Dayron Robles en los 110 con vallas con 12.92 segundos; Yipsi Moreno en el lanzamiento del martillo con 76.36; Yordanis García en el decatlon con 8257 puntos; Roxana Díaz en los 200 metros con 22.68 segundos, cerrando Yarisley Silva con 4.30 en el salto con pértiga.

    Con esto se completa un excelente año para el atletismo cubano, matizado también por el acostumbrado desempeño en la tradicional gira de verano por Europa y en otras competencias mundiales.

    Así nuestro deporte demuestra una ves más, el buen camino que sigue en el presente ciclo Olímpico, lo que augura que en Beijing habrá que contar con varios atletas cubanos en pos de las medallas.

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revista digital · Año 12 · N° 114 | Buenos Aires, Noviembre 2007   © 1997-2007 Derechos reservados