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Introducción

    La jornada intercentros surge como una propuesta del Instituto Municipal de Deportes (IMD), a los centros educativos de dos zonas de Sevilla, Pino Montano y Torreblanca.

    Dicha propuesta consistía en la realización de unas Jornadas de Convivencia Deportiva en el estadio olímpico de Sevilla, coordinada por el profesorado de Educación Física de dichos centros y un responsable del IMD.

    Con la realización de esta jornada se persigue la consecución de una serie de valores sociales y personales, como son, el respeto, la colaboración, la convivencia, amistad, respeto por las normas, compañerismo, aceptar los resultados, saber ganar y perder, no primando el resultado deportivo ni la competitividad y sí la participación y la diversión.

Desarrollo previo a la actividad

    Tras la primera reunión informativa con el coordinador del IMD, se comunicó al Claustro de profesores dicha actividad.

    Una vez aprobada la actividad por el Consejo Escolar, se realizaron diversas reuniones entre todo el profesorado especialista de Educación Física de la zona de Torreblanca, estableciéndose en la primera de ella un calendario de actuaciones.

    En las sucesivas reuniones se fueron concretando los diversos aspectos a tener en cuenta para la realización de la jornada:

• Se elaboraron actividades diferentes para educación infantil y el primer ciclo con respecto al resto de primaria y primer ciclo de secundaria.

• Se establecieron las funciones del voluntariado, permaneciendo un voluntario coordinador en cada modalidad deportiva y otro voluntario en cada pista de juegos que hacía las veces de árbitro. Los tutores debían permanecer en todo momento con el grupo clase, controlando los desplazamientos de un deporte a otro y el comportamiento del alumnado. En caso de accidente el voluntario sería el encargado de trasladar al alumno/a al punto de asistencia médica, existiendo una ambulancia dentro del estadio.

• Los juegos que se eligieron para la etapa de infantil fueron: castillo hinchable, payasos y lanzamiento de puntería.

• Para el primer ciclo se estableció también una zona aparte, bajando a la pista para la realización de relevos. Además de este juego, se desarrollarían otros como: el pañuelito, puntería, paracaídas, balón tiro, payasos y castillo hinchable.

• Los juegos para el resto de ciclos serían: fútbol, baloncesto, voleibol, balonmano, relevos y salto de longitud.

• En cada deporte existía un especialista de educación física coordinando a los voluntarios, que estaban en comunicación constante entre ellos por walkie.

• El cambio de un deporte a otro se marcará con música.

• El alumnado de cada centro se identificaría con una camiseta de un color determinado con lo que la actividad era más atrayente, y a la llegada al estadio, se ubicarían en una zona de la grada en donde habría un cartel identificativo de su centro, hecho por ellos mismos.

• En cada deporte existían cuatro pistas, desarrollándose paralelamente cuatro juegos, excepto en el relevo que habría ocho calles. Cada uno de los cursos jugaría contra otro curso de su mismo nivel de otro centro, siempre el mismo.

• La situación de partida, señalando el deporte donde comenzarían y el itinerario a seguir se le entregaría a cada tutor con antelación. Los cursos irían rotando siempre al mismo campo de juego en función de la letra asignada a cada campo, es decir, si comenzaran en el campo A del primer deporte, pasaría al campo A del segundo deporte, y así sucesivamente. La distribución del primer ciclo sería la siguiente:

    La distribución para el resto de ciclos sería:

• En todas las modalidades deportivas el número de participantes por equipo sería de diez jugadores, haciendo los cambios los tutores/as.
  
  

• Los especialistas en educación física llegaron al acuerdo de adaptar las reglas de los deportes para que todos los cursos jugaran con las mismas normas, siempre teniendo en cuenta que el objetivo no era el resultado, ni el aprendizaje técnico específico, sino el disfrute de la propia actividad. Como por ejemplo:
  
  

  • En los juegos de equipo favorecer la participación de todo el alumnado, haciendo que el balón pase por todo el alumnado.

  • Los equipos serían mixtos

  • Se evitan los roles específicos dentro de los grupos ya que había rotaciones en el transcurso del juego.

Conclusiones

    Debemos destacar la excelente participación de todo el alumnado, así como, del profesorado y la buena coordinación entre los diferentes centros. No hubo incidencias destacables, no teniendo que intervenir el servicio médico en ningún momento. En la memoria final de curso se destacó, como muy positiva, esta actividad, por todos los ciclos.

    Como aspecto a mejorar para posteriores encuentros deportivos similares, programar una reunión previa con el voluntariado que fuera a participar en la misma.

Bibliografía

• Junta de Andalucía (1998). Orden de 14 de julio de 1998, por la que se regulan las actividades complementarias y extraescolares en los centros docentes de Andalucía.

• Sáenz López Buñuel, P. (1997) La educación física y su didáctica: manual para el profesor.

• Giménez Fuentes-Guerra, F. (2003) El deporte en el marco de la educación física.

• Díaz Trillo, M. Sáenz-López Buñuel, P. Tierra Orta, J. (2002) Iniciación deportiva en primaria: Actividades físicas organizadas.

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revista digital · Año 11 · N° 103 | Buenos Aires, Diciembre 2006   © 1997-2006 Derechos reservados